El entorno legal y regulatorio empresarial en Colombia está en constante evolución. En particular, el régimen de matrices y subordinadas ha captado la atención de la Superintendencia de Sociedades, especialmente después de la pandemia.
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En 2021, la Superintendencia lanzó un programa de regularización para matrices y subordinadas, reduciendo las sanciones de 200 salarios mínimos mensuales legales vigentes (SMMLV) a un máximo de 27 por grupo regularizado. Además, permitió canjear el 50 % de la sanción por participación en cursos impartidos por la entidad.
Desde inicios de 2024, la Superintendencia ha intensificado sus esfuerzos para garantizar el cumplimiento del artículo 30 de la Ley 222 de 1995, promoviendo la transparencia y legalidad en las relaciones entre empresas matrices y sus filiales o subordinadas.
El régimen de matrices y subordinadas obliga a las empresas a informar sobre las relaciones entre una matriz y sus filiales o subordinadas. Estas relaciones están reguladas por la Ley 222 de 1995, que establece los principios y las obligaciones que deben cumplir las empresas que conforman este tipo de estructuras empresariales.
Si se detectan irregularidades o incumplimientos en el régimen de matrices y subordinadas, la Superintendencia de Sociedades tiene la facultad de imponer sanciones acordes a la gravedad de las infracciones. Estas sanciones pueden incluir:
Multas a los controlantes, a la sociedad y a los administradores.
Destitución de administradores.
Toma de control.
Disolución de la empresa en casos extremos.
Multa de $260,000,000 por no informar adecuadamente la estructura de control en el registro mercantil colombiano.
Multa de $232,000,000 y $116,000,000 por no revelar su condición de controlantes en el registro mercantil.
Multa de $232,000,000 por no incluir en el registro mercantil a seis sociedades extranjeras con sucursal en Colombia.
Para promover la transparencia y combatir la evasión fiscal, la Superintendencia de Sociedades firmó un convenio de colaboración con la DIAN para intercambiar información sobre el Registro Único de Beneficiarios Finales (RUB).
El 19 de abril, la Superintendencia anunció la firma de este convenio en virtud del artículo 13 de la Ley 2195 de 2022. Este acuerdo fortalece las funciones de la Superintendencia para:
Investigar situaciones de control y grupo empresarial.
Indagar en la responsabilidad de los directivos.
Mejorar la intervención en esquemas de captación ilegal de recursos y en actividades financieras específicas.
Recoger información en investigaciones de soborno transnacional y corrupción.
Gracias a este acuerdo, la Superintendencia podrá verificar la información proporcionada por las empresas sobre sus beneficiarios finales, fortaleciendo los mecanismos de control y supervisión empresarial y asegurando que las empresas cumplan con sus obligaciones legales, contribuyendo al desarrollo económico y social del país.
En conclusión, el régimen de matrices y subordinadas en Colombia se ha convertido en un aspecto crucial de la regulación empresarial. La Superintendencia de Sociedades vigila de cerca su cumplimiento, por lo que es fundamental que las empresas verifiquen si están cumpliendo con las obligaciones derivadas de la situación de control y grupo empresarial. Si no es así, deben tomar medidas inmediatas.
Finalmente, es importante recordar que, en caso de incumplimiento de la ley de transparencia, las sanciones administrativas pueden alcanzar hasta 200.000 SMMLV.