El Índice de Economía de Cero Emisiones Netas de PwC, indica que la reducción global de la intensidad de carbono ha alcanzado su nivel más bajo en más de diez años. El análisis más reciente revela que, para limitar el calentamiento global a 1,5 °C, es crucial que el mundo descarbonice su economía a un ritmo veinte veces más rápido. Dado que superar este umbral se está convirtiendo rápidamente en una posibilidad inminente, se requieren medidas audaces para alcanzar nuestras metas climáticas.
Este Índice es nuestro indicador anual que mide los avances en la reducción de las emisiones de CO2 relacionadas con la energía y la descarbonización de las economías. En 2023, la tasa global de descarbonización fue de apenas el 1,02 %, lo que significa que el mundo debe acelerar este proceso veinte veces más rápido para limitar el calentamiento a 1,5 °C por encima de los niveles preindustriales.
Tasa de descarbonización global, la más baja en más de una década.
La posibilidad de superar este umbral se está convirtiendo rápidamente en una realidad. Además, limitar el calentamiento a 2 °C, el límite inferior de la ambición del Acuerdo de París requiere un cambio radical en nuestro progreso, alcanzando una tasa anual de descarbonización del 6,9 %.
Se están logrando avances graduales, especialmente en el crecimiento de la capacidad de energía renovable. Sin embargo, a medida que la demanda de energía aumenta, nuestra dependencia de los combustibles fósiles sigue en aumento, y estos continúan dominando la combinación energética.
Reducir la intensidad energética y gestionar la demanda de manera más eficaz brinda a empresas y gobiernos la oportunidad de acelerar la adopción de medidas necesarias. El sector privado puede liderar la implementación de tecnologías de eficiencia energética, adoptar modelos de negocio circulares y aplicar procesos de fabricación avanzados. Por su parte, los gobiernos pueden potenciar estos esfuerzos al alinear las políticas públicas con la innovación del sector privado, lo que representa un paso crucial hacia un futuro energético seguro y sostenible.
Las tendencias actuales indican que la brecha entre la ambición y la acción está creciendo. El margen de maniobra se está cerrando, lo que hace fundamental realizar esfuerzos inmediatos y sostenidos para transformar el progreso gradual en un cambio exponencial. Solo así podremos garantizar un futuro sostenible y resiliente para todos. Es momento de actuar.
La reducción de emisiones se está desacelerando, lo que pone en peligro el cumplimiento de los objetivos del Acuerdo de París en la economía mundial. La tasa de descarbonización debe aumentar drásticamente para limitar el calentamiento global a 1.5°C. Por esta razón, se necesita una acción colaborativa entre gobiernos y el sector privado, impulsada por políticas públicas ambiciosas y avances tecnológicos sostenibles.
“Si no tomamos medidas audaces, corremos el riesgo de superar los 1,5 °C de calentamiento y, cuanto mayor sea el exceso, más grave será el impacto. A pesar de estas advertencias, la brecha entre los objetivos y las acciones está creciendo. Sin cooperación mundial, la posibilidad de mantener el calentamiento dentro de límites seguros desaparecerá. Para lograr los cambios necesarios, debemos ampliar el uso de energía renovable, gestionar mejor la demanda energética y aumentar el apoyo financiero y técnico para una transición justa”.
Emma Cox
Directora Global de Clima, PwC Reino Unido
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El Índice de Economía de Cero Emisiones Netas 2024 de PwC monitorea el progreso en la tasa global de descarbonización. Este año, el análisis muestra que la reducción en la intensidad de carbono se ha estancado en su nivel más bajo en más de una década, con solo un 1,02 %.
Esto implica que ahora el mundo debe descarbonizarse veinte veces más rápido que el año pasado para limitar el calentamiento global a 1,5 grados. Superar este umbral se está convirtiendo rápidamente en una posibilidad real.
Las consecuencias de sobrepasarlo no son abstractas; se traducen en pérdidas concretas: de vidas, medios de subsistencia y recursos. De hecho, ya podemos observar estos impactos en nuestro entorno, con fenómenos climáticos como olas de calor, inundaciones y tormentas, que resultan en crecientes costos económicos y dificultades para las personas. Incluso limitar el calentamiento a 2 grados, el mínimo objetivo del Acuerdo de París, requiere un cambio radical en nuestro progreso.
A pesar de un crecimiento del 14 % en la capacidad de energías renovables el año pasado, la demanda de energía está superando este avance. Esto ha llevado a un aumento del 1,5 % en el consumo de combustibles fósiles, lo que demuestra que nuestra dependencia de estas fuentes sigue en aumento.
Existe aquí una oportunidad para que empresas y responsables políticos revisen de cerca cómo abordar la demanda y mejorar la eficiencia energética, además de continuar impulsando el lado de la oferta energética.
Necesitamos una acción colectiva a gran escala para lograr el cambio exponencial que se requiere. Esta colaboración debe darse tanto dentro de las empresas, en áreas como operaciones, finanzas y tecnología, como externamente, entre industrias, territorios y sectores público y privado. Las tendencias actuales muestran una creciente brecha entre la ambición y la acción. Sin embargo, si trabajamos juntos, podemos asegurar que nuestras acciones climáticas tengan un impacto real.
La reducción de la intensidad de carbono se ha estancado en su nivel más bajo en más de una década, con apenas el 1,02 %.
El sobrecalentamiento de 1,5°C se está convirtiendo en una realidad que se traduce en olas de calor, inundaciones y tormentas que provocan crecientes pérdidas económicas y devastación humana.
Aumentó un 14 % la capacidad de energía renovable. Sin embargo, los combustibles fósiles siguen siendo dominantes.
Se necesita apoyo financiero y tecnológico por parte de los países desarrollados para una transición justa en las naciones en desarrollo.
Se necesitan medidas urgentes en materia de eficiencia energética y gestión de la demanda.
Se necesita colaboración entre el sector público y el privado para gestionar eficazmente la demanda de energía.
Este artículo está basado en el artículo “Net Zero Economy Index 2024” de PwC UK. Esta versión es organizada y revisada por PwC Colombia.