Autor: Aryurie Najera, Gerente de Consultoría en PwC Interaméricas
El reinventarnos o transformarnos es un aspecto de relevancia que puede marcar la diferencia en el mercado competitivo en el que operamos, donde lo único constante es el acelerado cambio, y la tecnología o digitalización es el habilitador de dicha transformación.
Cuando hablamos de transformación digital, necesitamos tener claro que es un camino que tiene inicio, pero que no tiene fin, y lo podemos ver en las diferentes etapas de revolución industrial que ha vivido la humanidad, desde el uso del vapor y el carbón para mover máquinas hasta la actualidad con la 4ta Revolución Industrial que abarca la nube, inteligencia artificial (IA), biometría, Impresión 3D, IoT y energías renovables, entre otros. Todas estas nuevas tecnologías y tendencias obligan a las organizaciones a contar con estrategias ágiles que permitan responder rápidamente a los cambios continuos que se presentan en cada época.
Para poder alcanzar una transformación digital exitosa necesitamos comprender y responder las siguientes preguntas, según la realidad de nuestro negocio:
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Al ser la transformación digital un concepto donde la tecnología es un pilar fundamental, muchas personas consideran que se trata únicamente de digitalizar las operaciones y servicios de una organización, sin tomar en consideración aspectos como las personas, la gobernanza, los procesos, las políticas, la cultura, hasta el servicio en sí, por lo que debemos entender primero: ¿Qué es la transformación digital?
Si buscamos en diferentes fuentes de información, podemos encontrar muchas definiciones de transformación digital. No obstante, la idea principal que debe quedar clara al definir la digitalización, sin la variante de transformación, es que hace referencia a la incorporación de elementos digitales en actividades o procesos manuales. Esto, en la mayoría de los casos, provoca un cambio en la forma en que se hacen las cosas, reduciendo los riesgos de un procesamiento manual y generando muchos otros beneficios, pero no cambia el resultado. Si incluimos la variante “transformación” en un proceso de digitalización, se estarán abordando actividades relacionadas a generar un cambio para obtener el mayor provecho al esfuerzo de resolver una situación, o cerrar una brecha, mediante el uso de soluciones tecnológicas.
Dicho lo anterior y desde el punto de vista empresarial, la transformación digital busca la reinvención de una organización o negocio utilizando como habilitador medios digitales o tecnológicos, considerando horizontalmente la organización con el objetivo claro de darle más valor a los clientes, mejorar los servicios, y generar una ventaja competitiva, de adentro hacia fuera.
Teniendo claro el objetivo principal de una transformación digital es importante listar algunos mitos sobre el tema:
La transformación digital solo está relacionada con la tecnología: Esto es falso, ya que es importante que la transformación digital al menos considere aristas como estrategia, procesos, cultura, personas y tecnología, entre otros.
Son proyectos largos, costosos y complejos: Dependiendo del tamaño de una organización, el objetivo y la estrategia, hay muchas opciones de configurar los pasos a seguir, algunos modelos pueden ser proyectos cortos, de bajo costo y simples.
Es solo para grandes empresas: No importa el tamaño de la organización para iniciar una transformación digital, hoy tenemos muchas soluciones en el mercado listas o a la medida para solventar una necesidad, útiles y de fácil acceso.
Es solo para organizaciones expertas con equipo robusto en tecnología: La transformación digital se enfoca en el conocimiento del negocio, de dónde estamos y a dónde queremos llegar utilizando la tecnología como habilitador, por tanto, depende de la estrategia que se quiera seguir.
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Para iniciar un proceso de Transformación Digital, primero debemos hacer una pausa en el camino y preguntarnos: ¿Dónde estamos?, ¿Hacia dónde queremos llegar? Si aún no podemos responder a estas dos preguntas, necesitamos retroceder y hacer una valoración de estos aspectos. Pero si ya sabemos dónde estamos situados y sabemos el destino o meta que queremos alcanzar, debemos trabajar en una estrategia que tome en consideración las nuevas tecnologías emergentes y digitales que ayudan a alcanzar los objetivos propuestos, mejorar la experiencia del cliente, fidelizar, generar mayor demanda de productos, aumentar visibilidad, disponer de nuevos canales, etc.
Es importante aclarar que la transformación digital, aun utilizando un enfoque de agilismo, no es un proceso de la noche a la mañana, pero con el abordaje o estrategia correcta se puede acelerar con ciclos cortos, logrando resultados rápidos para ir avanzando y liberando estrés dentro de la organización.
Si vemos la transformación digital como una escalera, donde el primer escalón es revisar mi situación actual e identificar cuál es el valor que le quiero brindar al cliente (interno o externo), y el último escalón es la evolución de mis servicios mediante un ecosistema digital abierto, se necesita trabajar en una estrategia gradual y ágil que administre los recursos de forma inteligente y rápida para generar más valor con menos trabajo y así propiciar resultados de forma inmediata.
Otro aspecto importante por mencionar es que no existe una receta para realizar una transformación digital, ya que la misma depende del modelo de negocio de una organización y los resultados que la misma quiera alcanzar. No obstante, si se deben tomar en consideración al menos los siguientes aspectos para iniciar una transformación digital:
Revisar mi situación actual e identificar brechas
Definir el destino (modelo de negocio) y con esto una estrategia clara con sus respectivas métricas
Desarrollar planes de acción ágiles que se puedan adaptar rápidamente hacia los resultados deseados
Alinear la cultura hacia el pensamiento digital. ¿Qué es pensar en digital? Es identificar cómo la tecnología puede ayudarme a resolver un problema o situación.
Involucrar al personal
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Para desarrollar una estrategia de transformación digital se debe tomar en consideración que existe 5 tipos de arquetipos de modelo de negocio digital:
Cada uno de estos arquetipos cuenta con aspectos fundamentales que las organizaciones deben contemplar en su estrategia para organizarse y acelerar su proceso de transformación digital.
Para finalizar y complementar todos los aspectos mencionados anteriormente, se debe tener claro que:
La digitalización de operaciones es fundamental para una transformación digital, si nuestras operaciones no están digitalizadas, difícilmente vamos a poder llevar a cabo una transformación digital.
Se debe involucrar al personal durante todo el proceso de transformación digital. Si las personas no están preparadas, no conocen y no se han desarrollado las habilidades requeridas, se retrasará o se presentarán problemas durante el esfuerzo de transformación digital.
Repensar o reimaginar nuestro negocio utilizando los medios digitales como habilitador, eso es la transformación digital.