Según estudios de PwC, hasta el 85% de los gastos de una organización pueden estar relacionados con la contratación de personal, sin embargo, el 68% de las organizaciones no adoptan sistemáticamente un enfoque estratégico y basado en escenarios para la planificación de la plantilla. Esta grave desalineación tiene como trasfondo la "gran renuncia", los cambios hacia el trabajo remoto e híbrido y un entorno económico global impredecible, por lo que nunca ha sido tan esencial para los líderes implementar una estrategia de personal integral que prepare a su organización para el futuro del trabajo. PwC ha identificado cinco áreas clave en las que deben centrarse estas estrategias:
Planificación: ¿Cómo se integran los procesos de planificación financiera y de personal del negocio? ¿Cómo cambiará la composición del personal en función de las nuevas tecnologías, los modelos de abastecimiento o la estrategia de localización?
Propósito: ¿Cómo se están tomando decisiones de trabajo que estén alineadas con el propósito y los valores declarados?
Talento: ¿Están haciendo las inversiones correctas en los programas de talento actuales con el fin de preparar al negocio para el futuro? ¿Atrae la marca el talento adecuado? ¿Están las inversiones de re-capacitación construyendo la combinación correcta de habilidades de gerencia y digitales? ¿Los programas de diversidad, bienestar y recompensas satisfacen las necesidades de la fuerza laboral del futuro?
Tecnología: ¿Se están optimizando las inversiones en tecnología para impulsar la experiencia digital de los empleados y el nivel de productividad adecuado?
Organización: ¿Hasta qué punto se integran las consideraciones sobre el "futuro del trabajo" en el modelo operativo?
El marco de diagnóstico de PwC evalúa los puntos fuertes o débiles de la empresa en estas cinco áreas, y ayudan a determinar las medidas que se deben tomar para mejorar.