Construir o renovar las capacidades y/o infraestructura interna permite una solución verdaderamente beneficiosa en la empresa, con una inversión del departamento de impuestos adaptada únicamente a las especificaciones de la compañía. Sin embargo, el desafío empieza con el costo y el tiempo invertido en el mantenimiento constante, dado que los cambios ocurren a un ritmo acelerado.
Al crear una solución, los líderes fiscales deben considerar cómo estar enfocados en el futuro, siendo escalables y ágiles a medida que el cambio y la innovación avanzan, y también la disponibilidad de talento que varía.
A diferencia, comprar una solución gestionada, subcontratada o compartida, permite a las empresas aprovechar el uso de una plataforma tecnológica comprobada y además, contar con un grupo de profesionales capacitados para actuar rápidamente y a su vez eliminar los costos continuos de mantenimiento. Sin embargo, esta requiere asociarse con un proveedor de confianza que garantice el nivel idóneo de control y gobernanza.
Al comprar una solución, los líderes fiscales suelen considerar cómo ellos pueden mantener el control, obtener una solución integral y tecnológica, y complementar de manera efectiva a sus equipos internos, todo con la flexibilidad de integrar este proceso internamente en una fecha posterior.