Upskilling: Liberando el potencial de la fuerza laboral

En la historia reciente de la humanidad, las grandes revoluciones industriales han venido acompañadas por cambios tecnológicos importantes, así lo fue con la máquina de vapor, con la incursión de la electricidad, la automatización y más recientemente con la revolución digital. Sin embargo, lo que marca una diferencia importante en este momento que nos ha tocado vivir, no es solo la magnitud del cambio tecnológico, sino su velocidad. Estos dos factores, es decir el avance tecnológico a una velocidad sin precedentes y que solo tiende a ir más rápido, han ido abriendo una importante brecha entre las habilidades que las organizaciones requieren para continuar siendo competitivas y las habilidades que las personas que integran esas organizaciones tienen o van adquiriendo (a una velocidad mucho más lenta que el avance tecnológico). 

Según un reciente estudio de PwC, llamado Hopes and Fears 2021, realizado a alrededor de 32.500 trabajadores, un 39% de ellos considera que sus trabajos van a ser obsoletos en los próximos cinco años. Lo anterior nos comprueba la necesidad de expandir o reemplazar el set de habilidades de la fuerza laboral actual. Y lo cierto es que tienen razón de tener esta preocupación, la cual debe ser tanto para las personas como para las compañías y los gobiernos, pues, aunque las compañías quisieran reemplazar su fuerza laboral actual por una fuerza laboral con las habilidades necesarias sería financieramente inviable por los costos de despedir y traer gente nueva. Esto es por el hecho de que tal vez no encontrará todas las habilidades requeridas afuera en el mercado y, si lo hace, debido a la escasez de las mismas tendría que pagar un premium económico importante para poder atraerlo, lo cual se podrá hacer en algunas ocasiones, pero serán las menos, esto entonces nos introduce al concepto de upskilling.

El upskilling de la fuerza laboral consiste en la expansión de las capacidades y, por ende, la empleabilidad de las personas con el fin de progresar en su portafolio de competencias, incluyendo habilidades técnicas, blandas y digitales, buscando convertir el conocimiento en resultados tangibles. Más allá del concepto técnico, el upskilling es una herramienta integral que ayudará a cerrar la brecha digital, fomentando sociedades, economías y una fuerza laboral más inclusivas, resilientes y capaces.

La pandemia, irónicamente, ha jugado un rol importante para acelerar este proceso, ya que forzó a las organizaciones y su gente a romper paradigmas y reflejó como un espejo la magnitud y la importancia de ir cerrando rápidamente estas brechas. Según este mismo estudio reciente de PwC, un 40% de la fuerza laboral en alcance manifestó que durante la pandemia causada por el COVID-19 le hizo frente a la automatización de manera efectiva, al acelerar su aprendizaje de habilidades digitales y adaptarse ágilmente al trabajo remoto. A pesar de esto, la desigualdad ha estado en crecimiento durante los últimos años, y la pandemia ha golpeado a las poblaciones más vulnerables en distintas aristas, a nivel socioeconómico, de género y digital. 

Con respecto al upskilling y la desigualdad digital, el rol que juegan los líderes organizacionales es de suma importancia, al generar oportunidades inclusivas para que la fuerza laboral tenga acceso a este tipo de entrenamiento y no se dé un efecto contraproducente donde, en lugar de reducir este tipo de desigualdad, se incremente. 

Para que las iniciativas de upskilling sean exitosas, a nivel estratégico, se requiere una relación simbiótica entre la sociedad, las organizaciones y el gobierno de cada país, de manera que se creen sinergias que contribuyan al éxito de la estrategia diseñada. A nivel técnico, se requiere identificar y desarrollar las habilidades y competencias críticas que serán más valiosas en el futuro para una determinada organización. Países como el Estados Unidos, Luxemburgo y algunos territorios del Reino Unido llevan la delantera en este tipo de iniciativas a nivel país, incluso Colombia y Costa Rica, entre otros, están ya dando pasos en esta dirección, tratando de convertir este reto en una fortaleza y ser percibidos como un Hub Digital. 

El upskilling es un reto y a la vez, una oportunidad para que los líderes organizacionales y los profesionales en Recursos Humanos tomen un rol protagonista y acompañen activamente a la fuerza laboral al navegar el cambio digital tan acelerado. Esta iniciativa organizacional no solamente implica esfuerzos en capacitación, sino también un cambio de mentalidad, una perspectiva global, una adaptación ágil y una gestión del cambio acertada; ya que la tecnología entrega resultados, pero estos solamente van a ser tan satisfactorios como la gente que trabaje con ella a diario. En síntesis, se necesita una combinación adecuada de personas adaptables y capacitadas, alineadas con la cultura apropiada y con los comportamientos necesarios para impulsar el éxito de la estrategia de upskilling.

Con base en lo anterior, estas son algunas actividades clave que los lideres organizacionales y, en mayor medida, los profesionales de Recursos Humanos pueden realizar para que este proceso sea exitoso:

  • Definir la fuerza laboral futura y comprender las posibilidades disponibles de la automatización

  • Evaluar las capacidades actuales de la fuerza laboral, en conjunto con los líderes de la organización

  • Hacer de la inclusión una prioridad, velando por los colaboradores que están en mayor riesgo 

  • Fortalecer el liderazgo organizacional de manera que fomenten, en mayor medida, un ambiente donde los colaboradores quieran adaptarse, aprender y evolucionar

  • Co-crear una experiencia de aprendizaje atractiva

  • Diseñar un plan de habilidades personalizado y acompañar a los colaboradores en el proceso, para que se sientan seguros en su trabajo 

  • Brindar las herramientas correctas a los colaboradores para su aprendizaje

  • Dar un seguimiento oportuno a la iniciativa de upskilling

Adicionalmente, los esfuerzos para upskilling de la fuerza laboral, pueden aprovecharse positivamente en varias aristas, pues, bien manejado, un programa de upskilling brinda beneficios organizacionales tangibles y enfocados en la experiencia del colaborador, más allá de la inclusión, la resiliencia y las capacidades. Dentro de ellos destacan: un aumento en el sentido de pertenencia de la fuerza laboral, la creación de equipos más seguros, un trabajo enriquecedor al contar con la formación necesaria para destacar en su rol, una mayor confianza en los colaboradores al haber contado con oportunidades de desarrollo y aprendizaje y, finalmente, una mejoría en la satisfacción de los colaboradores; todo esto impactando positivamente las estrategias de retención y atracción de talento de las organizaciones.

En conclusión, estamos frente a uno de los desafíos más grandes que la humanidad ha enfrentado, no en vano, un 48% de los encuestados considera que el empleo tradicional no existirá en el futuro y en una nota positiva, el 77% de los encuestados considera estar listo para aprender nuevas habilidades, lo cual revela un grado importante de conciencia y voluntad. 

En este sentido, hemos acuñado una frase que venimos predicando en nuestros artículos de PwC a nivel global, que dice que si bien no podemos proteger la forma tradicional de trabajar (es decir los trabajos actuales tal y como están diseñados), sí podemos proteger a los colaboradores y una de las mejores maneras de hacerlo en el mundo actual, es a través del upskilling. 

Es momento de comprender que el aprendizaje no se detiene cuando dejamos la educación formal en la escuela, el colegio o la universidad, sino que es una actividad continua durante nuestra etapa profesional y probablemente durante el resto de nuestras vidas.

Co-Autores: Mariela Erak, Consultora de People & Organization en PwC y Jorge de Mézerville, Director de People & Organization en PwC | Junio 2021.

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