PwC Process Intelligence se basa en el análisis de procesos construidos desde datos transaccionales reales de los sistemas de las organizaciones (como SAP, Oracle, Salesforce, Microsoft Dynamix NAV entre otros, así como diferentes sistemas legados).
Cuando esto se combina con el conocimiento y experiencia de PwC en los procesos de negocio y mejores prácticas, nos permite comprender e identificar mejoras de manera rápida y objetiva así como identificar ineficiencias y cuellos de botella a través de análisis automatizados de causa raíz.
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Una orientación holística que contempla la tecnología, pero también otras dimensiones como la organización y el modelo futuro de la organización para complementar la inteligencia de procesos y alinearla con la estrategia de la organización.
Conocer los procesos dentro de la organización es necesario para dirigir a la empresa en la dirección estratégica adecuada. Por esta razón apoyamos a las organizaciones en cada paso del camino, estableciendo un modelo de cuatro etapas:
En esta etapa se busca establecer los requerimientos mínimos indispensables, así como el alcance de los procesos actuales y alcanzar un entendimiento de punta a punta de los puntos de dolor de la compañía para alinear sus procesos con la estrategia del negocio. ¿Cómo lo hacemos? A través de:
Talleres con stakeholders para entender sus necesidades particulares
Entender los KPI del proceso a revisar
Entender la estrategia del negocio
Documentar los puntos de dolor y los KPI que se busca mejorar
En esta etapa se busca visualizar y encontrar las áreas adecuadas para impulsar la mejora continua en cuatro aspectos clave:
Gente: analizar la estructura actual, sus roles y habilidades
Tecnología: examinar los sistemas actuales implementados y su nivel de automatización
Modelo de Gobierno: entender y documentar el modelo de gobierno actual para detectar oportunidades de mejora
En esta etapa, establecer un Target Operating Model (TOM) ayudará a garantizar el mejor desempeño de los procesos, aprovechando al máximo los recursos y ayudando a distribuirlos de forma adecuada:
Gente: diseñar la estructura, roles y habilidades con base en los procesos establecidos a futuro, así como identificar las brechas en la estructura actual para reducirla
Tecnología: documentar requerimientos de soluciones tecnológicas que acompañen a los procesos futuros establecidos
Modelo de Gobierno: establecer el modelo de gobierno adecuado que esté alineado a los procesos, gente y tecnología futuros establecidos
Durante esta etapa se realiza la definición de iniciativas de mejora y la realización del caso de negocio más apropiado.
Palabras como RPA, minería de procesos y aprendizaje automático o transformación están actualmente en la agenda de muchas empresas. Sin embargo, el mero uso de estas nuevas soluciones, técnicas o tecnologías por sí solas no garantiza el éxito para las empresas, ya sea en la digitalización de sus funciones o en la optimización de sus procesos.
En muchas compañías, el uso de soluciones aisladas, como la automatización por separado de cada paso de un proceso, a menudo tendrá un impacto menor en el proceso en su conjunto de lo que se podría esperar. Es aquí donde establecer y adoptar la inteligencia de procesos puede hacer la diferencia para tu negocio para:
Obtener información sobre la efectividad operativa de los procesos
Unificar datos de manera centralizada para visualizar dashboards y flujogramas de proceso
Impulsar las decisiones y cuantificar el ahorro de costos
Personalizar un conjunto de métricas y los KPI en dashboards a la medida
Los procesos de negocio son la columna vertebral de todas las empresas y también los impulsores de la excelencia operativa si se aplican de forma adecuada.
A menudo, estos fluyen de formas distintas a las que fueron diseñados. Sin embargo, un enfoque adecuado de inteligencia de procesos puede ayudar a realineralos.
En PwC, creemos que la adopción de un enfoque basado en datos para la gestión de procesos ayuda a que las organizaciones puedan identificar, monitorear y mejorar los procesos reales que los colaboradores utilizan a diario.
Dado que los procesos de negocio a menudo se consideran una "caja negra", ¿cómo pueden las empresas gestionarlos de forma eficaz?
¿La empresa necesita identificar
ahorros en costos?
¿Toma demasiado tiempo en ofrecer servicios
o resultados a sus usuarios finales?
¿Sabe realmente cómo y dónde está gastando más tiempo su personal?
¿Puede identificar con eficacia qué y cómo puede automatizar procesos?
¿Está seguro de que sus procesos son totalmente compatibles entre si?
¿Sabe realmente lo que está sucediendo y cuándo dentro de sus procesos y operaciones?
¿Puede identificar las áreas de mayor riesgo para su organización?
Estos cuestionamientos, y el uso de las técnicas adecuadas para analizar el rendimiento de los procesos de negocio, y las desviaciones del desempeño esperado, serán clave para impulsar la excelencia operativa.
Aunque el análisis de minería de procesos le ofrece la posibilidad de trabajar en el proceso de un extremo a otro, un enfoque inicial inteligente sería ir tras la fruta madura y obtener logros a corto plazo. De esa manera, se establece una percepción positiva para convencer a las partes interesadas y a la gerencia sobre el enfoque de optimización impulsado por la minería de procesos. Más que en otros lugares, la participación de la administración es clave y el personal seguirá si las ventajas para la empresa están claramente definidas.
* Fuente: Reporte “Are your business processes a black box?” de PwC
Después de haber obtenido los primeros éxitos con la minería de procesos, el viaje no termina. Las oportunidades ocurrirán casi automáticamente en otras áreas, acercándolo al objetivo final de la excelencia operativa.