Conforme las empresas implementan herramientas de inteligencia artificial (IA) para mantener su relevancia en el mercado, es más evidente que el éxito de su adopción depende de distintos factores, como un talento capacitado o una infraestructura y gobernanza de datos lo suficientemente sólidas para respaldar los resultados esperados.
Desde la óptica de la función financiera, esta adopción exitosa también depende de un trabajo coordinado que involucra a la inteligencia artificial, como herramienta, los científicos de datos, como aliados estratégicos, y el CFO, como el líder de esta transformación.
Al entablar una colaboración estrecha con los científicos de datos en la adopción y uso de la IA, los directores financieros aumentan sus opciones para potenciar a la función financiera y la manera en que contribuye a la estrategia del negocio.
¿Conoces de qué forma los avances en inteligencia artificial y ciencia de datos están elevando el papel estratégico de la función financiera de las empresas? Los modelos predictivos generados por la inteligencia artificial permiten una comprensión más profunda de los riesgos y oportunidades, sentando una base sólida para evaluar diferentes escenarios estratégicos y tomar decisiones con base en evidencias. Mientras que los científicos de datos utilizan técnicas estadísticas y algoritmos de aprendizaje automático para generar estos modelos, la inteligencia artificial se encarga de identificar patrones complejos y tendencias, ofreciendo perspectivas de gran valor gracias a su capacidad para analizar grandes volúmenes de datos.
El círculo virtuoso se cierra con la función financiera, que, con su conocimiento y visión estratégica, puede evaluar de mejor manera el impacto financiero de sus decisiones, establecer metas realistas y garantizar la alineación con los objetivos de la organización.
La complejidad en la planificación y formulación de escenarios se ha elevado debido a diversos factores, entre los que se encuentran el acelerado cambio en las regulaciones y las expectativas de los consumidores, las condiciones económicas fluctuantes en un mundo globalizado, así como el acceso a una gran cantidad de datos internos y externos.
Para abordar este desafío, la conjugación de la inteligencia artificial, la ciencia de datos y la función financiera es clave, ya que se pueden utilizar algoritmos y técnicas de análisis avanzadas.
El trabajo entre la inteligencia artificial, la ciencia de datos y la función financiera tiene el potencial de transformar la manera en que las empresas gestionan los riesgos y cumplen con las regulaciones. La IA puede proporcionar un enfoque más preciso y eficiente para detectar y evaluar riesgos potenciales, así como localizar posibles incumplimientos o anomalías.
Una de las funciones más relevantes de la ciencia de datos en este aspecto es la implementación de técnicas de aprendizaje automático y minería de datos para identificar posibles riesgos y amenazas, y correlaciones en los datos que podrían indicar incumplimientos.
Al tener acceso a análisis y pronósticos con estas características, la función financiera, encabezada por el CFO, puede evaluar el impacto financiero de diferentes riesgos e incumplimientos y desarrollar estrategias para minimizarlos, incluyendo la asignación de recursos para un cumplimiento adecuado.
Además, la ciencia de datos puede ayudar en la adopción de sistemas de gestión de datos y en el diseño de controles internos eficientes. Esta colaboración con la función financiera no solo debe buscar la coherencia y precisión en los informes y reportes, también requiere garantizar la integridad y seguridad de los datos.
Al buscar la eficiencia operativa y la optimización de costos en una organización, la función financiera se enfrenta a desafíos relevantes, como la integración de datos, la calidad y consistencia de la información, analizar procesos y evaluar a detalle el rendimiento para encontrar ineficiencias y puntos de ahorro potenciales.
Abordar estos retos requiere un enfoque estratégico y una colaboración estrecha entre la función financiera y otros departamentos de la organización.
Los líderes financieros también requieren proactividad, agilidad e innovación que pueden estar impulsadas con tecnologías de vanguardia y un trabajo colaborativo.
La adopción de los principios de la IA responsable es esencial para garantizar un uso equitativo, transparente y seguro de la inteligencia artificial. Esto no solo promueve la protección de los derechos y la privacidad de las personas, sino que también fomenta la confianza en la tecnología y su aceptación generalizada.
IA responsable se basa en un uso responsable, de principio a fin. Esto implica establecer un marco normativo, considerar los sesgos y discriminaciones potenciales, proteger la privacidad y los datos, y promover la transparencia y la explicabilidad en los sistemas de IA.
En este contexto, la ciencia de datos y la función financiera, apoyados por las herramientas de inteligencia artificial, desempeñan un papel crucial en la adopción y supervisión de la IA responsable.
Si bien la inteligencia artificial puede implementarse para ejecutar tareas que son esenciales en casi todas las empresas y su función financiera, encontrar casos de uso que se ajusten a necesidades particulares aporta un valor adicional.
En este sentido, se requiere un enfoque estratégico, basado en una estructura previamente definida. Algunos de los pasos que un CFO puede seguir para este objetivo consisten en:
Fuente: PwC
Evaluación del riesgo crediticio: los algoritmos de IA pueden analizar datos crediticios, estados financieros y otra información relevante para evaluar la solvencia crediticia de los prestatarios. Esto ayuda a tomar decisiones informadas sobre la extensión de crédito y la gestión del riesgo crediticio.
Gestión de proveedores: la inteligencia artificial puede analizar datos de proveedores, métricas de rendimiento y condiciones del mercado para optimizar la selección de proveedores, negociar contratos y gestionar relaciones. Esto permite ahorrar costos, mejorar la eficiencia de la cadena de suministro y reducir riesgos.
Análisis de tendencias en el mercado internacional segmentado por industrias: los algoritmos de AI ayudan a los CFO a identificar nichos de mercado emergentes en diferentes industrias y geografías, anticipar cambios en la demanda o preferencias del consumidor. Esto puede incluir la personalización de productos o servicios para satisfacer las necesidades específicas de un sector o la optimización de la cadena de suministro para aprovechar oportunidades de venta.
La IA y las nuevas tecnologías están transformando la función fiscal, automatizando tareas y agilizando procesos para impulsar la productividad y eficacia.
El CFO desempeña un papel fundamental al liderar la inversión y presupuesto en ciberseguridad, fortaleciendo la defensa empresarial contra amenazas digitales.