Los impuestos verdes, también conocidos como impuestos ecológicos o ambientales, se centran en gravar a individuos o empresas que han realizado acciones que causan daños al medio ambiente o que planean llevar a cabo actividades con potencial para causar dichos efectos negativos.
En México, los impuestos verdes son implementados a nivel federal y estatal, y su objetivo principal es desalentar comportamientos y actividades consideradas perjudiciales para el medio ambiente. Es importante destacar que la legislación ambiental se basa en el principio precautorio, es decir, se toman medidas antes de que se produzcan daños al ecosistema.
Compra de ciertos combustibles o de vehículos automotores nuevos
Extracción y aprovechamiento de materiales pétreos, suelo y subsuelo
Emisión de contaminantes a la atmósfera y al agua
Descarga no controlada de aguas residuales con concentraciones de contaminantes fuera de parámetros a diferentes cuerpos receptores, suelo y subsuelo
Identificamos algunas consideraciones clave que contribuirían a obtener un mejor entendimiento de las obligaciones ambientales. Entre ellas, se destacan:
En nuestra guía de impuestos ecológicos en México podrás identificar áreas de oportunidad en tus operaciones de negocios y modelos de optimización de los posibles impuestos ambientales, federales y estatales que pudieran tener un impacto para tu organización