En la búsqueda de crecimiento en una economía cada vez más globalizada una adecuada gestión de riesgos puede ser una ventaja competitiva para afrontar los retos, como, el incremento de fuerzas competitivas y tecnológicas, aumento de regulaciones, mayor dependencia en terceros y afectaciones en la cultura laboral.
Las organizaciones deben evaluar objetivamente la capacidad que tienen actualmente para administrar los riesgos, evaluar su cultura e implementar una práctica sostenible de administración de riesgos.